BODAS DE PUEBLO

Las bodas en los pueblos son las mejores (aquí os dejamos el enlace al video «Estar en casa» de la boda que hicimos en Balmaseda -Bizkaia)  porque no tienen horarios y todo el mundo participa de ellas como si fuera su propia boda. Y así es como este sentimiento lo vivimos en Husillos (Palencia) de una manera especial.

Así pudimos comprobarlo la primera vez que pusimos un pie en el pueblo para hacer el vídeo de preboda al conocer a los padres y el hermano de María, su casa, su huerto, el río… todo el pueblo. Incluso nos volvimos con un bocata de jamón para el camino de regreso a casa porque se había hecho tarde.

Y otra vez, lo volvimos a sentir el fin de semana que fuimos a grabar el video de la boda. Ya que esos días fueron muy bonitos.

EL VIDEO DE LA BODA

Cuando llegamos nos encontramos al padre de María en la puerta de la iglesia subido a una escalera, colocando unas flores en el arco de entrada, mientras otros vecinos del pueblo ayudaban con los últimos retoques.

Otro motivo para guardar tan buen recuerdo es que para dormir nos abrieron las puertas de la casa de la abuela, incluso nos habían preguntado qué nos gustaba para desayunar y nos lo habían dejado preparado. Allí fue donde coincidimos con los chicos y chicas del grupo de música que iba a tocar en la ceremonia y el coctel de la boda. Si no habéis tenido la oportunidad de echar un rato con músicos, hacedlo… se intercambian los instrumentos entre ellos y van pasando de una canción a otra sin descanso, como si fueran una jukebox. Están muy locos. Y estos chicos eran especialmente agradables.

EL DIA DE LA BODA

El día de la boda todo tenía el ritmo de una boda de pueblo. Un ritmo pausado. María se maquillaba y vestía en casa de sus padres mientras una luz maravillosa entraba por las ventanas de la cocina, los invitados iban entrando y saliendo ante la atenta mirada del perrete de la casa.

Al mismo tiempo Ali, en Palencia, se vestía en el hotel AC Palencia porque es de Bilbao y toda su familia venía de allí.

BARI

María y Ali comenzaron su historia de amor en Bari, en el sur de Italia, cuando los dos coincidieron allí con una beca Erasmus. Las risas de Ali y unas cervezas les unieron, y desde entonces no se han separado (prácticas, trabajos, viajes…). Y aunque viven en Bilbao siempre que pueden vuelven a Husillos.

Son personas con un gran corazón, amables, cariñosos y risueños lo que hace imposible no quererlos.

LA BODA

El camino de la novia hasta la Iglesia, las decoraciones campestres, los saludos de los vecinos, la ceremonia, la música… son recuerdos imborrables que hacen que esta boda fuera especial.

Ambos querían que la boda estuviera llena de detalles: la bicicleta del abuelo de María, la tabla de surf del padre de Ali o el rincón de las abuelas que montaron en El Molino de Torquemada, un rincón natural a pocos kilómetros de Husillos.

Sólo esperamos haber podido reflejar todas estas emociones en el video de boda.

Una de nuestras bodas favoritas.